Tapia de Casariego: pleno vacío
Hacía casi seis meses (es decir, fuera de la ley) que nuestro Consistorio no celebraba un Pleno municipal. No importan, pues, los urgentes asuntos pendientes de nuestro concejo: saneamiento del río Anguileiro (una cloaca que desemboca en la playa); reponer los puntos de luz de la playa, completamente devastados por oxidables (a quién se le ocurre); urgente necesidad de un nuevo ambulatorio, así como de un cuartel de la Guardia Civil (que ocupa en precario la Casa del Mar, después de salir por pies de aquella chabola-cuartel); cubrimiento de la cancha deportiva del Instituto; ordenación del tráfico; rehabilitación del colegio público (cualquier día se viene abajo); plan turístico para el muelle (terrazas, limpieza, decibelios y horarios); un plan cultural al margen de la papiroflexia para niños; limpieza de calles, playas o ribeiros, y un larguísimo etcétera. Por no recordar las tan eternas como falsas promesas del alcalde Acevedo, a saber: un nuevo instituto, dos hoteles de cinco estrellas y un parador nacional, una piscina de agua natural (Os Cañóis), el Museo Campo-Mar, que se iba a instalar en el antiguo solar de la Guardia Civil, finalmente vendido, o no se sabe qué, a instalar en el antiguo ambulatorio de San Blas, convertido en una favela. Hablando de solares, ¿qué fue de aquel humo de 15.000 apartamentos a construir en Serantes, a cuyos habitantes, argumentaba Revilla, les había tocado la lotería? ¿No sería él mismo el pretendiente de dicho premio?
Pues nada que en el Pleno municipal de marras (dos días seguidos en primera página), el edil socialista Rafael Lavandera, tal vez en procura de un ascenso político, salió en defensa de la ingesta del presidente Areces, quien, probitín, tuvo que parar en Otur a comer un pincho de tortilla tras inaugurar el Consistorio tapiego, por culpa de la tacañería de Gervasio. Cuando nos enteramos, derramamos un mar de lágrimas. ¡Por la Virgen del Carmen! Nuestro presidente pasando hambre. ¿Hasta ese punto la crisis? No damos crédito. Menos mal, eso sí, que a los pocos días fue fraternalmente obsequiado (pagamos todos los asturianos) con una suculenta cesta de Navidad con productos ibéricos y bombones de la casa donde compraba doña Carmen Polo de Franco, y que cada noviembre es repartida entre todos los políticos y funcionarios de la Junta General del Principado, ¡qué caras!
Eso sí, todos, alcalde y concejales tapiegos (casi ninguno da la talla) cobraron 50 euros, ¿qué menos?, por debatir un pleno sobre pinchos, palillos y aceitunas. De Gervasio y de Rafael Lavandera nada más se puede esperar.
Pues nada, ahora que la hostelería saca pecho, a falta de otras ideas, mejor que abra el «Museo de la tortilla» ¡Qué fácil se lo están poniendo a Cuco González! (Alternativa pro Tapia). Nos alegramos de corazón.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo