La Nueva España » Cartas de los lectores » Bochorno en Madrid

Bochorno en Madrid

21 de Septiembre del 2011 - Julián Ruiz-Cantabrana Díez (Oviedo)

El pasado día 18 del mes de agosto se produjeron en Madrid acontecimientos que me han producido un gran bochorno e igualmente le ha ocurrido a muchos amigos y conocidos con los que he contactado. Y este bochorno no ha sido a causa del exceso de calor que ha caído sobre la capital, sino por otros acontecimientos mucho más graves y deleznables. Ante los hechos ocurridos, me hago esta larga pregunta: ¿cómo es posible que ante un acontecimiento como es la presencia en Madrid de miles de jóvenes pacíficos de todo el mundo, que van a recibir al jefe de su Iglesia, el Papa, nuestro querido Gobierno autorice una manifestación que se sabe contraria a dicha religión e incluso que se desarrolle por la Puerta del Sol de Madrid, punto neurálgico de la capital, donde confluirán necesariamente con cientos de esos jóvenes? Digo autorizada por nuestro Gobierno, porque a nadie se le escapa que dadas las circunstancias y el momento preelectoral en el que nos encontramos, la señora Delegada del Gobierno no les haya hablado del tema o se hayan interesado el ministro del Interior e incluso más altas o principales instancias como puedan ser el presidente del Gobierno y el candidato Pérez Rubalcaba.

¿Qué quieren hacer ver al mundo? ¿Que en España hay mucha oposición actualmente a la Iglesia católica? ¿Que no es lo quieren aparentar los católicos? ¿Que España es un Estado laico o, peor aún, ateo total?

Pues miren ustedes, señores del Gobierno y sus seguidores, cualquier domingo asisten más personas a misa que seguidores tienen ustedes.

Eso a misa, porque hay otro gran porcentaje elevado de católicos, aunque pueden ser más tibios en su prácticas, que fueron bautizados en su día, bautizan actualmente a sus hijos, han hecho su primera comunión, acuden a los actos de su patrón o patrona y a las procesiones y se entierran por la Iglesia.

Pero es que aunque fuesen un pequeño grupo, ¿por qué autorizar una manifestación radicalmente contraria en los días y por los lugares donde pueden encontrarse? ¿Qué fin persiguen? ¿Que haya encontronazos y escándalo?

Dicen que lo hacen en aras de la libertad. ¿De qué libertad? No me hagan reír, ustedes buscan desprestigiar la visita del Papa, desprestigiar a los católicos, que los jóvenes peregrinos se lleven de vuelta a sus países una imagen distorsionada de la realidad. Pues creo que ustedes se van a llevar un gran berrinche, y lo siento, cuídense el corazón al ver la multitud que le va a acoger, somos muchos los españoles, católicos y no católicos, que estamos encantados con su visita, que le deseamos una excelente estancia en nuestra nación y que queremos demostrar al mundo entero que España es una nación moderna, que acoge bien a todo el mundo, que las raíces de su historia están muy arraigadas en el cristianismo y que aún somos muchos, pero muchos, los que nos sentimos católicos, más o menos cumplidores, y que tenemos como nuestro jefe espiritual al Papa, al cual deseamos se lleve un grato recuerdo de nuestra España. ¡Ah!, y que nos sentiríamos complacidos con cualquier otra visita, espiritual, política o de cualquier signo, que sea respetuosa con todos los demás.

Cartas

Número de cartas: 46053

Número de cartas en Septiembre: 157

Tribunas

Número de tribunas: 2086

Número de tribunas en Septiembre: 8

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador