Réplica al señor Pello, de UGT Oriente
Muy señor mío:
En contestación a su amable carta al director, tan sólo decirle que me reitero en todo lo escrito, en cuanto a la labor «despachada» por el sindicato que usted dirige en nuestra comarca, referente al Hospital Comarcal del Oriente de Asturias. ¿Dónde han estado ustedes a lo largo de la última década? ¿Bailándole el agua a sus amigos del PSOE? No tiene que darme ninguna lección, si es lo que ansiaba, pues desde siempre defendí la incorporación a la red pública sanitaria del Principado de Asturias. Además, por si le interesa, le diré que no milito –ni antes ni ahora– en ningún partido político, por mucho que a usted le guste poner etiquetas a la gente de la zona oriental.
Por cierto, ya que usted habla de Parres y de Cangas de Onís, la próxima vez le informaré con todo lujo de detalles sobre los hechos acontecidos no hace mucho tiempo en la localidad canguesa con motivo de la última huelga general. Le recuerdo que, en su momento, se lo comenté personalmente a las puertas de la cafetería de la que usted es cliente habitual, en la villa de Arriondas. ¿Ya lo ha olvidado? Insisto, no me va a costar demasiado rememorarle aquellos actos un tanto, digamos, vandálicos.
¡Ah!, me consta que usted paseaba, ya entrada la noche, por la urbe canguesa para informar, eso sí, amistosamente, a ciertos empresarios del inicio de la jornada de huelga.
Me acusa, así lo entiendo, de amañar fotografías de algunas de las movilizaciones de su sindicato ugetista. Ahí pierde totalmente el tiempo.
Diríjase si no al director del periódico para hacerle llegar su queja y malestar por mi proceder, según usted, con las supuestas fotos de marras. No obstante, le invito a que busque las instantáneas que dice «retocadas» y, si lo considera conveniente, me lleve a los tribunales por esa supuesta trampa en el tratamiento de las susodichas fotos. Es muy grave la acusación que me achaca y más cuando llevo bastantes años dedicado a tareas informativas en la comarca del Oriente, tanto suya como de los demás ciudadanos que no comulgan con sus dictados de liberado.
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