Uno de cocineros
Es muy malo el chiste, más bien macabro, así que absténganse amargados salvo que precisen material nuevo para seguir ejerciendo de "insultadores profesionales".
Resulta que un internacionalmente famoso y campechano cocinero asturiano cuelga un anuncio en su red social habitual ofreciendo trabajo a cualquier etarra que se arrepienta...Y claro, le caen poquísimos aplausos y abundantes adjetivos "descalificativos". En cambio otro mediático cocinero vasco sigue en su línea: Disimulando.
Hala, viva la reinserción.
Mi musa, con lo malísima que suele ser, no me sopla al oído nada contundente esta vez porque está algo apagada con lo de "bulto sospechoso" que me han llamado anteayer: La pobre, como es cortita, piensa que tengo que salir corriendo a hacerme una mamografía porque no le ve otro significado que el estrictamente tumoral al insulto de marras ...Dice que "caray" con la indiferencia que inspiro, si llego a inspirar odio me fusilarían al amanecer...Y eso sí, me ofrece muchos insultos terribles que se sabe ella para este individuo, pero le digo que no es ético ni moralmente admisible ensañarse así con el pobrecico resentido, que bastante tiene con haberse desenmascarado él solito por fin: Al "alter ego" local de D. Sigmund Freud resulta que le traiciona el subconsciente y acaba intentando ofender verbalmente a una mujer por solidarizarse con otras o por ejercer a su manera la libertad de expresión. Menos mal que no ofende quién quiere sino quién "puede"...
Para colmo mi verdadera psicoanalista ha emigrado a Galicia con la disculpa de haber aprobado unas oposiciones, pero yo sé que ya no podía aguantarnos más a mi Ello, mi Yo y mi Súper-Yo, con nuestros delirios de grandeza de heroína maña, con la manía de "sentenciar" sobre cualquier cosa en LNE y con los "alticharcos", digo, altibajos, de una paciente primitiva y perturbada sin recato alguno, que de tanto ver "Sexo en Nueva York" ya se piensa que una mujer es un igual de un hombre en esos temas...
Encima Mariano que viene este viernes a Avilés nos dice a sus militantes que tengamos prudencia con lo de ETA.
En fin, que tengo poca cancha para hablar de nada, con lo bien que me va este tratamiento de escribir para mantener el optimismo y una mínima salud mental. Pero sólo me pregunto en voz alta, a quién pueda interesar: Si el cocinero asturiano tiene la posibilidad de ofrecer algún puesto de trabajo, ¿por qué no contrata ya a algún pinche de cocina, camarero o cocinero de los que engordan cada día las listas del paro...?
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