Al pueblo de Tapia y a sus legítimas autoridades
De todo mi respeto y consideración: Desde hace muchísimos años, enero de 1942, tenía yo 20 años y, Dios mediante, antes de acabar el año seré nonagenario..., tengo un fuerte y especial afecto a Tapia, que hoy se revive ante la pretensión de una empresa de abrir en las proximidades de la villa una mina de oro... que preocupa a algunos, no tanto a otros... con el hipotético y muy problemático tema de puestos de trabajo...
Lo de la «protohistoria» de mi afecto a Tapia. Enero 1942. Por una grave irreflexión mía (juventud inexperta...) me creé un grave problema, sin experiencia laboral, hambre, máxime en la cuenca minera de donde procedía... y, además, ocasioné un muy fuerte disgusto a un excelente y pobre sacerdote..., etcétera, etcétera. Decidí viajar a las proximidades de Vegadeo, cogí el Alsa en Oviedo, en tercera, o sea, viajando en el techo del bus, enero, frío, hambre...
En Luarca subió al bus un soldado, también en tercera, iba a Tapia, hablando de lo uno y lo otro me ofreció apearme en su pueblo, Tapia, y su familia, pobre, me ofreció cama (yo no sabía dónde iba a poder dormir...). Sólo cama (un potosí), nada, no podía de ninguna manera... Al día siguiente, en ayunas, emprendí viaje a las cercanías de Vegadeo. Allí se repitió la parábola del hijo pródigo, en la que la figura principal no es el hijo que regresa y pide perdón, sino la del padre que al recuperar al hijo lo perdona y... lo abraza, etcétera, etcétera.
Recibí orientación, una carta familiar, y ocupación provisional y enfoque para el porvenir, que, poco a poco, hasta una carrera de grado medio, y el encuentro con la mejor mujer para formar una familia: cinco hijos, seis nietos, dos casados ya, yo a la espera de noticias...
Hoy me interesa Tapia, sólo por haber ido dos años a la salve marinera en honor de la Virgen del Carmen, y algunos pocos días agosteños. Hoy, el tema, proyecto y pretensión de la mina de oro en Salave, que conozco mucho. Piénsenlo bien todos, vecinos, autoridades, y esta frase, que se me clavó hace años por otros temas, «el capital no tiene entrañas», piensa en madurar y capitalizar, más y más. Pensad si puede afectar a la salud, pues oí o leí que en la minería el oro y el cobre son cancerígenos... No perdáis vuestro entorno único, magnífico. «L’amour ou une bonne amitié font beaucoup, mais l’argent tout atteint» («El amor o una buena amistad hacen mucho, pero el dinero lo consigue todo»). (De mi mini Bachillerato elemental).
Termino, mi respeto también al pretendiente, señor Pinkowski, de quien, ha unos meses, leí una carta (en español) correctísima, además de respetuosa.
Un fuerte abrazo a todos los tapiegos.
José María Huerta González, Oviedo
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