Una forma inadecuada de actuar
Paso a contarles lo que ocurrió en el día 07/04/09 en la biblioteca Bances Candamo sita en el casco histórico de Avilés.
A las 20,05 horas de la tarde subimos en el ascensor de la planta cero cuatro personas, para acceder a los pisos superiores.
En ese momento el ascensor se avería y nos quedamos parados entre la planta 1ª y la 2ª, aproximadamente, y si las puertas del ascensor tienen 2 metros de alto quedó media puerta bajo el piso y la otra encima de él. Pulsamos el interfono exterior de averías para que alguien nos atendiera y no funcion; pulsamos después el botón de alarma interior del ascensor y no acude nadie.Uno de nosotros, a través de su teléfono móvil, da el aviso a la policía municipal, (él o la) policía no sabe situar la biblioteca Bances Candamo. Decidimos golpear la puerta para que alguien avise a los funcionarios de la biblioteca; al cabo de diez minutos los funcionarios abren las puertas del ascensor, hablan con nosotros para tranquilizarnos y decirnos que el servicio de averías tardará otra media hora en venir, que el operario ya estaba en su casa. Uno de nosotros, el mas osado, sale del ascensor por sus propios esfuerzos, los otros nos quedamos para que izasen el ascensor manualmente y pudiésemos salir sin peligro y sin lesiones. A las 8,45 horas los funcionarios nos traen una escalera pequeña y nos invitan a salir por nuestros propios medios. Accedemos ante la eventual incertidumbre de si viene o no viene el servicio técnico del ascensor (Thyssen).
Hasta aquí los hechos.
Ahora vienen las reflexiones.
Por qué no funcionan los sistemas de alarma exterior del ascensor.
Por qué hay un servicio de averías tan pésimo que no acude a las urgencias.
Por qué no se instruye a un responsable municipal a mover el ascensor manualmente en el caso de que no venga el servicio de averías. (la negación de auxilio es un delito).
Lo peor de este asunto es que teniendo una normativa y unos procedimientos tan estupendos nos los saltamos a la torera, porque no pasa nada, hasta que pasa.
Hay una teoría que dice que por cierta cantidad de comportamientos inseguros ocurre un incidente, cada varios incidentes un accidente, y cada cierto número de accidentes una desgracia que puede ser fatal.
Pensemos en ello y si hacemos leyes y normas, cumplámoslas.
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