Salario social
La Junta General del Principado ha hecho una ley incompleta, mal legislada, que permite dar dinero a cambio de nada; un salario de por vida mientras no se comunique que se está trabajando, cosa que nadie hace, en la que la mayoría de los profesionales de los servicios sociales no está de acuerdo, pues la gente se acomoda a cobrar la prestación y no sirve para hacer una inserción profesional.
Se da el caso de que como uno de los requisitos es estar dos años empadronado en Asturias, no tener rentas, ni trabajo y no se ejerce ningún control ni seguimiento sobre los usuarios, hay perceptores que están cobrando el salario y trabajando incluso asegurados y la ley no permite reclamar esos importes percibidos, también aunque ya no vivan en Asturias, siguen cobrando el salario, si por casualidad se envía una carta y el cartero pone «ausente» en vez de «desconocido» tampoco pasa nada, pueden seguir cobrando, que no se levanta ningún tipo de inspección.
Se da ahora un «efecto llamada» solicitando este salario gente de otros países que se empadronan con sus familiares, se apuntan como demandantes de empleo y se van para su país, como también se puede sellar la demanda de empleo por internet, a los dos años vuelven y solicitan salario social, y luego, cuando lo tienen arreglado, se van a su país de origen a disfrutar de él, pues no existe ningún control.
Ésta es la situación que tenemos en Asturias, y ningún político hace nada para controlarlo, lo que hace que estemos pagando todos los trabajadores la carga social de todos éstos que en número creciente tanto españoles como extranjeros se apuntan al carro del «gratis total» y además trabajando en la economía sumergida o bien legalmente, que además tienen otras miles de ayuda en vivienda, comida, comedor, preferencia para elegir colegio, etcétera.
Cuando anteriormente era el IMI, tenían que hacer trabajos sociales, estaban apuntados cuatro gatos; ahora, como no hay que hacer nada, todos se apuntan.
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