A vueltas con el bautizo civil

Yo sigo dándole vueltas al asunto del BAUTISMO CIVIL y es que no consigo tranquilizarme, tengo un desasosiego que no me permite descansar. Estoy en un sin vivir permanente.

Como no deseo acabar con la producción mundial de tila y hoy dispongo de tiempo, me armo de paciencia y tomo el diccionario, es un decir, en realidad lo que hago es consultarlo a través de Internet que uno no es vago pero tampoco se trata de despilfarrar.

Según el de la RAE, Bautismo es:

1. m. Primero de los sacramentos del cristianismo, con el cual se da el ser de gracia y el carácter cristiano.

2. m. En diversas religiones, rito de purificación.

3. m. bautizo.

Si consulto Bautizo, obtengo:

1. m. Acción de bautizar.

2. m. Fiesta con que esta se solemniza.

Y por último si lo que busco es BAUTIZAR, dice:

1. tr. Administrar el sacramento del bautismo.

2. tr. Poner nombre a algo.

3. tr. coloq. Dar a alguien o a algo otro nombre que el que le corresponde.

4. tr. coloq. Mezclar el vino con agua.

5. tr. fest. Arrojar casual o intencionadamente sobre alguien agua u otro líquido.

6. tr. Cuba. Adulterar un líquido echándole agua.

Es este último término el que más posibilidades ofrece para aceptar que los políticos puedan considerarse legitimados a distorsionar lo privado, a apropiarse de símbolos que les son ajenos sin importarles lo más mínimo los sentimientos de los que los profesan, a convertir lo que para los creyentes es el primer sacramento en algo banal, a frivolizar con el rito por el que los cristianos afirman entrar de pleno derecho en la Iglesia, se convierten en hijos de Dios;

Por pura lógica hay que descartar la primera acepción por estar claro que se refiere al plano puramente religioso.

El segundo significado podría entenderse si no fuera porque el nombre, a la criatura, ya se le pone en el Registro Civil, con lo cual no sería aplicable a lo que pretende el ayuntamiento de Grado.

Si observamos la tercera tampoco encaja, si de lo que se trata es de cambiar el nombre de la criatura, que ya son ganas, tampoco tiene sentido pues es en el mismo Registro donde es preceptivo efectuarlo. Pudiera ser que esta ceremonia se diseñe para cuando haya disputa entre las familias progenitoras sobre el nombre que se deba adjudicar al recién nacido. Si es así perfecto, que con pocos días tenga ya claro el infante en que país ha nacido, que se entere que toda su vida va a ser pura confusión.

La cuarta acepción, al igual que la sexta, no comprendo porqué la diferenciación añadiendo a esta última el determinante de que es en Cuba donde se entiende así, que digo yo que aguar el vino se añade en Cuba, en Chile, en Tegucigalpa y hasta en Laponia. Bueno pues entiendo que no justificaría una ceremonia en el ayuntamiento, se hace todos los días en nuestras tascas de forma sencilla, exenta de todo boato y afortunadamente sin la intervención de ningún edil.

Y por último tenemos la quinta. ¿Arrojar agua a alguien justificaría que habría que llevarlo al ayuntamiento?, ¿y sólo allí se podrá cometer tal acto?. Propongo entonces que el día de Santa Ana la policía local se dedique a encarcelar a media población de este Concejo que se dedica a vaciar cubos, perolas, ollas, y todo utensilio susceptible de contener el líquido elemento, sobre los transeúntes que se divierten de esta insana manera.

Claro que si lo que contemplo es la segunda acepción de bautizo entonces lo que me viene a la cabeza es que los ediles lo que pretenden es sustituir a los hosteleros de la zona y convertir por unas horas el consistorio en lugar para el ágape que acompaña a toda celebración religiosa, civil o militar que se precie.

¿Serán capaces de sufragar los banquetes de los bautizos que el señor párroco tenga a bien celebrar? Hombre es original pero igual es una forma de fomentar la natalidad. Olvídense ustedes de los dos mil, tres o lo que sea por nacimiento, en Grado le proporcionamos la fiesta gratis total. Tengan cuidado señores ediles a la hora de legislar porque ya saben que cierta etnia nacional prolonga estos convites durante tres o cuatro días.

Podría ser una medida para fomentar el empleo ya que durante la celebración las oficinas municipales deben permanecer cerradas y habría que recuperar posteriormente el tiempo perdido. Pero bien pensado sería también una manera de aglutinar a la hostelería de Grado que en la actualidad parece estar más disgregada que los partidos políticos. Y si no vean los días de cierre semanal, parece que se ponen de acuerdo para cerrar todos el mismo. Aquí se pondrían todos de acuerdo para evocar, y ya era hora, a la familia propia y política de nuestros gobernantes.

Mi error debe ser buscar una explicación razonable, una utilidad productiva al acto que se intenta implantar en nuestro querido Municipio. Y no, no deben ir por ahí los tiros, el tema debe ser mucho más lúdico. Se supone que nuestros amados concejales lo deben querer instaurar por un afán de hacer patente la extraña relación que Grado mantiene con el agua. Ya sabemos que por la villa discurren tres ríos y esto debe dejar una huella indeleble.

Ahí debe radicar el auténtico motivo a esta loable iniciativa, y a pesar de las enormes privaciones que les supone, están dispuestos a sacrificarse por sus conciudadanos, a volcarse para conseguir que los moscones sigan en permanente contacto con el agua, con cualquier disculpa, pero siempre remojados por fuera, por dentro ya es otra cosa.

¡Cuánto altruismo!, ¡como se desvelan por nosotros los gobernantes municipales!, Nunca agradeceremos bastante su abnegación.