Felechosa

Felechosa es otra cosa

Marcos Palicio

Santos Nicolás Aparicio, profesor y estudioso de las tradiciones de su pueblo, lamenta el daño estético del «espectacular» progreso que ha experimentado la localidad

Territorio vaquero

Fermín Rodríguez / Rafael Menéndez

Felechosa, que pierde población pese a su tránsito de la economía ganadera a la industria del ocio, trata de articular el turismo con la pervivencia del patrimonio natural e histórico

Fuertes de Invierno

Marcos Palicio

Felechosa, transformada física y económicamente por la expansión inmobiliaria asociada al turismo invernal, busca estrategias desestacionalizadoras y diversificadoras dentro y fuera del sector de las vacaciones

Situación en el mapa

 

A punto de nieve

Latitud: 43.10433559326549
Longitud: -5.5059099197387695

El último gran núcleo habitado antes de que «La Raya» de San Isidro cambie Asturias por León ha insertado en el caserío rural tradicional los bloques modernos de vivienda en altura, residuo de la expansión urbanística del cambio de milenio y de la propagación del turismo invernal que arrastra el esquí en Fuentes de Invierno. Felechosa acopla su caserío a las dos rectas y la curva que traza por aquí la carretera AS-253 y al cauce del río San Isidro en vertiginoso descenso hacia su disolución en el Aller. La explosión turística no ha impedido que los 647 habitantes de 2001 hayan restado hasta 580 en 2011, de cerca de mil a 849 en la parroquia de El Pino, la más meridional y montañosa de Aller, que va de los 590 metros de la Pola del Pino a los 1.595 del alto de San Isidro, pasando por los 651 de Felechosa.